Declarado Bien de Interés Cultural en el año 1966, el conjunto histórico de esta ciudad milenaria alberga un valioso patrimonio que le ha hecho ser una de las ciudades predilectas para ser visitada por miles de turistas dentro de la región andaluza.
Quizás, el Puente Nuevo es su monumento más icónico y reconocible. Esta emblemática construcción fechada a finales del siglo XVIII une los barrios más importantes de la localidad: la Ciudad, de origen árabe, y el Mercadillo, claros contrastes entre la zona histórica y moderna, mientras que ofrece unas impresionantes vistas del Tajo de Ronda, garganta de más de 100 metros de profundidad excavada por el río Guadalevín. Tanta magia asoma en la ciudad rondeña, que el mismísimo literato Ernest Hemingway aconsejaba personalmente su visita; y el cineasta Orson Welles, asiduo a sus corridas de toros en los años 50, eligió Ronda para su descanso eterno.