Dos recientes investigaciones de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) revelan que las pantallas y monitores de los dispositivos electrónicos pueden provocar consecuencias negativas en la visión y que, a largo plazo, pueden llegar a ser irreversibles. Los estudios, realizados en animales de experimentación y en epitelio pigmentario humano, ratifican los graves efectos que la luz de pantallas digitales puede provocar en los ojos.
Tras la publicación de estos estudios, la Comisión Europea ha requerido a los investigadores los resultados y ha creado un comité científico para analizar las potenciales consecuencias para la salud visual de los ciudadanos de los países miembros.