
La Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó, el pasado 23 de julio, la Resolución A/75/L.108, para impulsar, hasta el año 2030, el tratamiento de 1.100 millones de personas en el mundo que están en riesgo de perder la visión por problemas tratables actualmente.
La resolución, aprobada por unanimidad, es el primer acuerdo diseñado para abordar la pérdida de visión evitable y pone en valor la salud ocular como parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones Unidas. Además, crea nuevas expectativas para que las instituciones financieras internacionales y los donantes proporcionen recursos específicos para ayudar, de manera especial, a los países en desarrollo a abordar la pérdida de visión prevenible.