Un equipo de investigadores de la Universidad de Stanford en Estados Unidos ha podido restaurar la visión de manera parcial en ratones invidentes, permitiendo que se vuelva a transmitir información desde el ojo hasta el cerebro, a través de la regeneración del nervio óptico. Aunque los roedores solo recuperaron la visión de forma fragmentaria, se trata de un avance de gran valor científico que puede conducir en el futuro a curar la ceguera en seres humanos.