Denominada originalmente como Accitania, se trata de uno de los asentamientos más antiguos de la Península Ibérica. Una obra de arte natural que goza de una posición privilegiada a los pies de Sierra Nevada, rodeada de la flora y la fauna que les ofrece los parques naturales de las sierras de Baza y Huétor.
Sus características cuevas trogloditas de arcilla, el aspecto rojizo de su alcazaba árabe del siglo XI y su icónica Catedral barroca, engalanada con multitud de detalles, aportan todo ese amalgama de paisajes, olores y sabores que nos sugieren que nos transportemos tanto a otros lugares del planeta como a épocas ya pasadas, sin necesidad de movernos de esta Guadix milenaria, uno de los enclaves históricos y culturales más característicos de la geografía andaluza.